
Pues así sin darnos cuenta ha pasado un mes y hemos terminado el Whole30. Si habéis ido siguiendo mi Instagram habréis visto que mal, lo que es mal, no se come, ni tampoco llega a ser aburrido. Existen infinidad de recetas aptas, solo hay que darle un poco al coco.
Entonces, ¿aquí se acaba todo? No, nos ha servido para quitarnos esa adicción al azúcar. Más que adicción, era el por un día no pasa nada. O de esto no me voy a morir. O no hay que ser tan estricto. Y no, en mi opinión no hay que ser tan estricto, pero estas ocasiones que deberían ser puntuales estaban siendo demasiado frecuentes. Así que si vienes ahora y me ofreces mi croissant favorito o un helado te diré que no. Porque realmente no me apetece.
¿Qué notamos? Más energía, mejores digestiones y mejor sueño. Y creeme que con un bebé de 7 meses se agradece. ¿He perdido peso? La verdad, no me pesé antes de empezar, hace tiempo que desterré la váscula de casa y que dejé de creer que el peso era importante. Quizás un par de quilos si habré perdido. Lo noto en la ropa. Y en que mis abdominales han vuelto a aparecer. También hemos estado haciendo bastante ejercicio y Emma y la lactancia influyen. Hemos conseguido tener una buena rutina de alimentación y ejercicio que se lleva casi sin darte cuenta.
¿Que cambia ahora? Pues voy a reintroducir algunos alimentos, pero sin ir a lo bestia. De momento el queso curado de leche cruda de oveja de Castilla la Mancha, que me estaba esperando en la nevera, cortesia de mi padre. El Kéfir, lo hacemos en casa y lo tomamos un par de días a la semana para desayunar. Y mi chocolate 100%. Además de paleoizar algún que otro alimento, como tortitas, gofres, pizzas, panes… que en su versión original no son nada saludables (prometo recetas muy interesantes). Pero de momento los cereales y las legumbres se van a quedar a un lado.
Seguiremos este noviembre con un estilo de vida paleo, sin gluten, sin azúcar, sin ultraprocesados y haciendo ejercicio. Aunque a finales de mes nos vamos unos días de casa rural…. ya os contaré, pero libres de gluten y azúcar no van a estar. Así que seguramente hagamos otro reset antes de que se nos vengan encima las Navidades.
2 comentarios sobre “Whole 30. Día 30, the end?”
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