Mousse helada de coco y cacao

Segundo helado postre frío de este mes de julio: sin azúcar, sin gluten, sin lácteos, sin huevo… Vamos que solo lleva dos ingredientes, leche de coco y cacao en polvo.

Es mi sacia antojo por excelencia, ya sea invierno o verano. Rápido y sencillo. Alto en grasas buenas, recordad que la grasas no son las malas de la película. Y bajo en carbohidratos, por no decir ninguno, apto así para dietas cetogénicas.

También es apta para bebés, mayores de 12 meses, por el cacao y en pequeñas cantidades. A Emma le encanta y siempre que la hacemos nos persigue, sube al sofá para que le demos una cucharadita.

Podéis además utilizar esta mousse de coco y cacao como complemento para otros postres, cubrir o rellenar bizcochos. Incluso como desayuno añadiendo frutos secos u otras frutas, os quedará un bowl de lo más vistoso y sobretodo nutritivo y saludable

Ingredientes principales

• Leche de coco
• Cacao en polvo

Es un postre que suelo comer en la misma taza dónde lo hago. Por lo que la cantidad de leche de coco es aproximadamente de 1/2 taza. La cantidad de cacao a vuestro gusto, yo suelo ponerle unas 3/4 cucharaditas.

Ingredientes extra

• Coco rallado
• Nibs de cacao
• Nueces
• Bayas de goji
• Frutos rojos congelados
• Etc.

Instrucciones

1. Meteremos horas antes una lata o brick de leche de coco en la nevera (yo suelo guardarlas ahí, así siempre están listas para lo que pueda surgir).
2. Abrid con cuidado la lata y con una cuchara cogeremos toda la parte cremosa, evitando coger la parte de agua, así nos quedará una mousse mucho más cremosa y fácil de montar. La pondremos en una taza, bol o un recipiente que no sea muy grande. Me he dado cuenta que para montar la leche de coco es mejor si hay menos espacio. Con la leche que yo suelo usar no me hace falta separar el agua, pues contiene un 60% de coco, simplemente mezclo bien el brick antes de abrirlo.
3. Añadimos el cacao al gusto, podéis modificar más tarde.
4. Con una batidora de varillas removeremos aumentando la potencia gradualmente (sino el cacao os saldrá disparado) hasta el máximo. Tarda un poco en montarse, pero tened paciencia.
5. Cuando empiece a espesar guardaremos el recipiente en el congelador 10 minutos. Volveremos a batir. 10 minutos más en el congelador. Añadimos los ingredientes que nos gusten, removemos por última vez y ¡ya estará lista.

Podéis comerla al momento (esa es la idea) o congelarla del todo para más tarde o otro día. Simplemente deberéis sacarla un rato antes d congelador para poder disfrutar de ella.